"Un cargo fundamental para el mundo del libro como es la dirección de la
Editora Regional, que durante treinta años ha formado parte destacada de
la estructura de funcionamiento de la Consejería de Cultura, sigue a
estas alturas sin cubrir mediante nombramiento oficial y se ignora si
existe intención de dotar el puesto por parte de la actual consejería. El poeta y profesor Álvaro Valverde, que desempeñó este
cargo durante varios años, ha clamado reiteradamente a través de su blog
contra la aparente amortización de la dirección de la Editora
Regional. «A cambio se ha perdido la posibilidad de sacar adelante
publicaciones que ningún editor privado abordaría, teniendo en cuenta
además que en la región estos editores son una especie exótica», se
queja Valverde.
El escritor alude a la importancia del Catálogo creado
por la Editora Regional, al interés que despertaban sus títulos en
editores y lectores de fuera de la región y a las expectativas que fue
capaz de crear entre gente joven que se abría al mundo de la letras.
«Este parón, más que indignante es increíble -dice-, porque hay que
tener muy poco amor a la cultura y a los libros para hacer esto en una
tierra que siempre estuvo atrás y que ahora lo había superado, para
dejarlo malbaratar». Para Álvaro Valverde, la Editora Regional había
conseguido convertirse en la mejor editora pública del país y eso le
hace difícil soportar esta especie de neutralización de la misma que no
ha suscitado reacción pública ni de gente de la cultura ni del PP o el
PSOE, a los que Valverde hace culpables de un silencio corresponsable.
«Esta es una región de apáticos y no sé si de cobardes», se lamenta".
Mercedes Barrado, diario Hoy, "La cultura recortable".