Puerta del Sol |
Mi amigo Carlos Medrano, que sigue en esa red social, me informa de que José Luis García Martín ha colgado en su Facebook el siguiente comentario (que, como él bien sabe, agradezco):
«"El balcón de mi abuela / era un observatorio / desde el que vi la vida / cuando era pequeño", escribe Álvaro Valverde en su último libro, "Plasencias". "Ya no existe el balcón", continúa. Pero todavía existe la hermosa plaza y sigue siendo un microcosmos en el que bulle la vida de la pequeña ciudad provinciana. ¡Qué hermoso libro "Plasencias"! Lo abrimos temiendo encontrar poemas de un limitado encanto costumbrista. Y nos encontramos con poemas que hablan de una ciudad muy concreta y de cualquier ciudad, de la vida de un hombre y de la vida de todos los hombres. Solo asentando muy firmemente los pies en un sitio podemos alcanzar los universales del sentimiento a los que aspira la gran poesía».