Tras La larga cadena del ancla. La hora presente, de Yves Bonnefoy, en edición de Enrique Moreno Castillo, uno de los mejores libros de 2016, Galaxia Gutenberg publica en la colección que coordina Jordi Doce (al cuidado también de esta obra) Floreced mientras. Poesía del Romanticismo alemán. Su traductor es el poeta granadino Juan Andrés García Román, licenciado en Teoría de la Literatura y Literatura Comparada y doctor por la Universidad de su ciudad natal, quien antes de verter al español la lírica de estos dieciocho poetas alemanes (entre ellos, los Schlegel, August Wilhelm y Friedrich, Hölderlin, Novalis, Heine, Arndt, Brentano y Eichendorff), ya había traído a nuestro idioma parte de la de Rilke o las elegías del autor de El Archipiélago, de donde, por cierto, toma el título este florilegio.
Este es un libro importante. Porque ese movimiento artístico y literario lo fue, y mucho, y porque García Román actualiza, digamos, los versos de esos poetas fundamentales, una tarea que debería llevar a cabo cada generación.
Resulta muy estimulante la lectura del capítulo titulado "La poesía de la poesía", donde intenta explicar el editor la paradoja de cómo, a pesar de que estos versos representen la poesía del Romanticismo alemán, el espíritu de ese movimiento va mucho más allá, irreductible a "los géneros literarios heredados".
El volumen incluye un práctico apéndice denominado "Teorías" en el que se insertan diferentes textos sobre esa rica poética, unas "Notas" sobre los poemas, así como las sucintas biografías de los poetas seleccionados, que van desde los muy conocidos en España (el caso de Hölderlin) hasta los directamente desconocidos (como Clemens Brentano). La de descubrimiento, sí, es otra faceta destacable de esta obra que viene a rellenar, sin duda, un hueco.
El responsable confiesa que no ha querido "realizar una antología total o definitiva, sino una muestra digna y válida, un libro de lectura sin pretensión enciclopédica".
El pensador Isaiah Berlin escribió: "La estética romántica se funda en una creencia apasionada en la libertad espiritual y la creatividad individual". El encuentro entre Alemania y la poesía fue, ya se ve, memorable.
Resulta muy estimulante la lectura del capítulo titulado "La poesía de la poesía", donde intenta explicar el editor la paradoja de cómo, a pesar de que estos versos representen la poesía del Romanticismo alemán, el espíritu de ese movimiento va mucho más allá, irreductible a "los géneros literarios heredados".
El volumen incluye un práctico apéndice denominado "Teorías" en el que se insertan diferentes textos sobre esa rica poética, unas "Notas" sobre los poemas, así como las sucintas biografías de los poetas seleccionados, que van desde los muy conocidos en España (el caso de Hölderlin) hasta los directamente desconocidos (como Clemens Brentano). La de descubrimiento, sí, es otra faceta destacable de esta obra que viene a rellenar, sin duda, un hueco.
El responsable confiesa que no ha querido "realizar una antología total o definitiva, sino una muestra digna y válida, un libro de lectura sin pretensión enciclopédica".
El pensador Isaiah Berlin escribió: "La estética romántica se funda en una creencia apasionada en la libertad espiritual y la creatividad individual". El encuentro entre Alemania y la poesía fue, ya se ve, memorable.