30.5.10

Pepitu

Para mi tío, su amigo era José. En casa, Jose o Pepitu. Lo conocí en Barcelona cuando era un adolescente delgaducho, tristón y acomplejado que tenía la cara llena de granos. Nos enseñó la ciudad y sus alrededores. La no tan conocida cripta de Gaudí, en la Colonia Güell, por ejemplo. Siempre fue un buen guía. Y. y yo pasamos buena parte del mes de agosto del 83 en su apartamento de Tossa, durante nuestro modesto y feliz viaje de novios. De nuevo en Barcelona, volvió a descubrirnos rincones de esa ciudad casi perfecta. Vivió en Cornellá, charnego y catalán de procedencia murciana. Su padre murió en el exilio francés. Trabajó en la Philips. Estuvimos muchas veces juntos en Plasencia. Era dicharachero, bonachón, cariñoso, amable... Va a ser esto lo que me quede (lo que nos quede) de él. Fue como un tío para mí. Descanse en paz.