2.5.05

Confidencias

Nos lo decía Javier Cercas el sábado en el Parador de Plasencia, delante de un extremeñísimo plato de ancas de rana: "Si yo viviera aquí, haría como vosotros". Hablábamos de esa cosa tan anacrónica del compromiso del escritor con su tierra de origen. Si ésta se llama, además, Extremadura...
Luis Landero abominaba ayer en una entrevista del término "literatura extremeña" (ya saben, o es pensamiento o es navarro). Sin embargo, es tan difícil sustraerse a esta realidad que algunos vivimos día a día. Ha sido tan costoso superar los viejos complejos. Venimos del erial que venimos y el hecho de haber conseguidos algunas cosas nos lleva a veces a presumir un poco. Lo suficiente para poder seguir luchando por esa normalización cultural que nos merecemos desde hace siglos. Pero, claro, para comprender estas cosas... tal vez Gerona (o Girona) y Madrid estén un poco lejos. Y nosotros, acaso, en exceso ensimismados.