En estos tiempos de mudanza, hemos tenido ocasión de leer más de un currículum vítae para saber quién era el recién nombrado. No han faltado ocasiones para la risa. La "relación de los títulos, honores, cargos, trabajos realizados, datos biográficos, etc." que, según el diccionario, "califican a una persona" es, en muchos casos, tan pormenorizada que la sonrisa (cuando no la carcajada) surge de la forma más inocente, natural y espotánea. Con todo, lo que cuenta mi amigo Josemari Lama en su blog supera con creces todo lo leído. Pertenece al currículum de un pintor, paisano de mi padre y casi mío, que, por desgracia, acaba de fallecer. Como dice el flamante pregonero de la Feria de Zafra de este año, "a pesar de la muerte", "siempre me hizo gracia uno de los méritos que incluía en sus notas biográficas": 1979. Roban el cuadro “Ristra de ajos” del restaurante Casa Pepe.