22.11.11

McCullers y la muerte

Dicen que la primera frase de una novela es capital. Que en ella se condensa lo que viene y que da la verdadera medida de su valor. También que marca el tono y no sé cuántas cosas más, entre ellas, que no siempre es garantía de éxito. Reloj sin manecillas, de Carson McCullers (recuperada de su fondo por Seix Barral), comienza, un poco a la rusa, así: "La muerte es siempre la misma, pero cada hombre muere a su manera".