«En 1992, ese año, Chirbes publicó La buena letra,
una novela corta que, protagonizada por una mujer represaliada durante
la posguerra, se adelantó una década a la ola de ficciones sobre la
Guerra Civil. “Una voz de mujer que le devuelve el pasado al hijo que
quiere convertir la incómoda casa familiar en un solar”, así ha descrito
La buena letra su propio autor, al que le gusta “bromear” diciendo que,
en el fondo, era un libro contra el Decreto ley de Ordenación y Medidas
Económicas aprobado el 30 de abril de 1985 y bautizado popularmente
como ley Boyer, por el ministro de Economía de Felipe González. Aquel
decreto permitía, por una parte, transformar las viviendas en locales
comerciales independientemente de la calificación que tuvieran en los
planes urbanísticos; por otra, suprimía la prórroga forzosa de los
contratos de alquiler. “En 1991, poco antes de que se publicara la
novela apareció en EL PAÍS un artículo que hablaba de esa ley”, cuenta
Chirbes. “Lo escribió Isabel Vilallonga [entonces portavoz de Izquierda
Unida en la Asamblea de Madrid], y si lo lees ahora ves cómo anunciaba
todo lo que vino luego: subida de los precios, expulsión de los pobres
del centro de las ciudades, especulación”.»
"La gran novela de la crisis en España", Javier Rodríguez Marcos, El País, Babelia.
(Nota: Dedico la cita a Pedro Burgos Montero, que la estará leyendo.)