Giovanni Scarabello recogió el pasado sábado el "Premio Jacopo Allegretti per la traduzione" en la ciudad de Forlì.
Me cuenta, por ejemplo, que fue una "lástima que no nos dejaran leer las traducciones, como en cambio
hicieron los ganadores de la sección de poesía inédita, pero fue un día,
una tarde y un momento muy especial para mí, y mientras contaba esas
cositas en los dos minutos tan emotivos que me concedieron, sentí que
estabas ahí con nosotros, en ese aula de sabor antiguo, rodeada por
soportales bañados, a esa hora, de la luz anaranjada de la tarde."
Scarabello añade: "Me hace ilusión copiarte aquí las palabras que leyeron ayer como motivación al premio que me dieron, porque realmente reflejan lo que siempre había sido mi sueño -y mi preocupación- más grande. Dar fe de tu interior y de tus versos, respetando lo que eran y que son, lo que fueron los momentos que te hicieron escribirlos, lo que fueron esas tardes, lo que era y es tu vida."
Scarabello añade: "Me hace ilusión copiarte aquí las palabras que leyeron ayer como motivación al premio que me dieron, porque realmente reflejan lo que siempre había sido mi sueño -y mi preocupación- más grande. Dar fe de tu interior y de tus versos, respetando lo que eran y que son, lo que fueron los momentos que te hicieron escribirlos, lo que fueron esas tardes, lo que era y es tu vida."
Lo que allí se dijo fue: "La traduzione dei versi di Álvaro Valverde appare accurata e precisa
nel rispetto della forma metrica e stilistica dell'originale, capace
quindi di riprodurne il ritmo e, allo stesso tempo, di mantenerne
inalterato il contenuto grazie a una particolare sensibilità nella resa
lessicale."