28.1.13

Wert para creer

Quienes frecuentan este rincón recordarán que durante el pasado curso mi colegio, el "Alfonso VIII" de Plasencia, realizó un proyecto educativo en que se implicaron alumnos, profesores y progenitores: EncaminArte. Pues bien, hace unos meses, el equipo directivo con el director al frente (verdadera alma mater del asunto y quien concibió la idea de llevarlo a cabo) se acogió a la convocatoria nacional del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de los Premios CreArte (BOE nº 219, de 11 de septiembre de 2012) para el fomento de la creatividad en la enseñanza infantil, primaria, especial y secundaria; presupuestada con 300.000 euros repartidos en distintos premios; de ellos, cinco de 20.000 en la modalidad de Primaria. Se veían muchas posibilidades a tenor de la calidad del trabajo realizado y el claustro apoyó unánimemente que se enviara el correspondiente dossier al Ministerio. Las bases, además, se ajustaban como un guante al resultado.
"Hace pocos días -cuenta el mencionado director, Javier Juanáls Castro, en una carta dirigida a la Comunidad Educativa del centro-, ante nuestra petición de información dirigida directamente al departamento correspondiente del Ministerio de Cultura, se nos informa que por motivos económicos y por una decisión tomada por el Ministerio de Hacienda, dichos premios no van a resolverse ni fallar; por lo que todo el proceso queda anulado".
"No sabemos -continúa- si hubiéramos o no recibido premio; en un concurso nacional son muchos los trabajos presentados. Era, eso sí, un buen proyecto y se enviaron materiales y memoria suficientes para dar buena muestra de ello. Lo que sí tenemos claro desde el Claustro de Profesores es que en ningún caso estamos de acuerdo con los motivos en los que se apoya dicha decisión y que estamos buscando vías para mostrar nuestro parecer y opiniones al respecto. Es para ello para lo que os pedimos colaboración y asesoramiento, principalmente a padres y madres conocedores del Derecho (abogados), para que nos aportéis, si podéis, ideas o caminos de actuación. Nos gustaría tomar medidas y decisiones firmes al tiempo que equilibradas y razonadas".
No hace falta añadir que el disgusto es grande y que nos sentimos impotentes ante una actuación sin sentido. Por lo demás, se pregunta cualquiera, ¿dónde han ido a parar esos 300.000 euros ya presupuestados? En este país y visto lo visto (y lo que nos quedará por ver)... Sí, en buena lógica, Montoro gana.
Es verdad que el proyecto cumplió su finalidad, sólo educativa, pero qué bien nos hubiera venido ese plus de reconocimiento por la ardua labor realizada y, para compensar los penosos presupuestos que se manejan, los 20.000 euros de la gratificación. Seguimos. Esto no termina aquí.